¿Qué dice de una empresa que, mientras se hunde en la tormenta perfecta de problemas, decide que lo que realmente necesita es más diseño? Samsung acaba de nombrar a Mauro Porcini como su primer Chief Design Officer en medio de una caída del 50% en su valor de mercado y días después de perder a su co-CEO.
El diseño no es decoración. Nunca lo ha sido. Es la manera en que comunicamos valor sin palabras. Es cómo creamos significado a través de la experiencia.
Samsung está enfrentando vientos en contra: acciones a la baja, competencia feroz, pérdidas de liderazgo, amenazas arancelarias. La respuesta típica sería recortar. Reducir riesgos. Jugar a lo seguro.
En lugar de eso, apostaron por el diseño. Mientras otros tecnológicos reducen sus departamentos creativos, Samsung crea una posición sin precedentes y recluta a uno de los mayores talentos del diseño mundial para ocuparla.
Los que hemos seguido la trayectoria de Mauro no estamos sorprendidos, sino entusiasmados. Sus libros "L'etá dell'eccellenza" y "The Human Side of Innovation" no son simples lecturas, son manifestos sobre cómo el diseño transforma organizaciones completas.
Su concepto de "unicornios" redefine lo que buscamos en la innovación: no técnicos aislados, sino personas genuinamente apasionadas por crear soluciones significativas para seres humanos reales. Gente que merece ser celebrada precisamente porque conecta tecnología con necesidades humanas auténticas.
"Real, life-changing innovation starts with a passion to make something extraordinary for the people we love, for our community, and for our society."
Como Mauro mismo lo ha expresado, la verdadera innovación comienza con pasión, no con procesos.
Algunos modelamos nuestros roles como Chief Design Officers inspirados directamente en su ejemplo. No por imitación, sino por comprensión del valor fundamental que aporta esta perspectiva.
¿Y si quien tiene la posibilidad de mover el diseño como lo hacía Jobs es Mauro? A diferencia de muchos líderes tecnológicos, él ha demostrado que el diseño centrado en lo humano puede transformar incluso las industrias más tradicionales.
Gracias, Mauro, por tu generosidad al compartir conocimiento, por ser un mentor silencioso para quienes seguimos tu trabajo. Las pocas veces que hemos intercambiado mensajes han sido momentos de claridad invaluable. La pregunta ahora no es si harás magia en Samsung, sino cuántos más comprenderán lo que algunos ya sabemos: que el diseño no es un departamento, sino una forma de pensar.